14 de abril de 2017

RESÚMENES


MESA 1: Ecos animales en la literatura clásica


Edward Bush Malabehar, (Universidad Nacional Autónoma de México) “Ovidio y las enseñanzas del perico”
La poesía de Ovidio reviste ciertas características desde lo epistolar hasta lo épico. En lo que atañe de modo particular a una de las obras de mayor importancia, esto es, Amores, los temas no se reducen sólo a una cuestión erótico-amorosa, pues el poeta de Sulmona versó sobre un asunto que se vincula con los animales: el perico y su capacidad de imitar. En la ponencia, se expondrá cómo la imitación del animal presenta una analogía con la imitación de los seres humanos.

Tania Alarcón Rodríguez, (Universidad Nacional Autónoma de México) “La presencia de animales en los Flórida de Apuleyo”
Lucio Apuleyo nació en Madaura a mediados del siglo II de n.e., se le considera uno de los últimos escritores clásicos latinos. Entre sus obras se encuentra los Flórida, compendio de veintitrés textos fragmentarios, aun cuando algunos parecen completos; son ejemplos de los discursos demostrativos e itinerantes de la época y los asuntos que tratan son diversos y siempre están vinculados a la retórica o a la filosofía. En la mayoría de estos fragmentos se encuentra alguna descripción de imágenes o de escenas. El propósito de esta ponencia es presentar aquellos que se refieren a animales: el águila (II), el oso (III), elefantes y serpientes (VI), el papagayo (XII), y aves (XIII y XVII) y hacer un análisis de la manera en que Apuleyo los utiliza como un recurso estilístico para comparar, ejemplificar con el hombre, como en el caso del papagayo y las aves, o causar admiración entre su auditorio en el caso del oso y los elefantes y serpientes.

Amaury Mendoza Toro, (Universidad Nacional Autónoma de México), “Animales en disputa: el léxico latino de la injuria en la fábula animalística de Fedro”

La fábula esópica es uno de los géneros literarios que presenta una mayor trayectoria y recepción a lo largo de la historia, tanto en oriente como en occidente. Si bien la primera colección fabulística que nos ha llegado es latina, la realizada por Fedro en el siglo I d. C., es posible encontrar, de manera aislada, este tipo de narraciones ya en la obra de escritores de la Grecia Arcaica, como Hesiodo o Arquíloco, por hablar solamente de su transmisión en Occidente.
 Las colecciones antiguas de Fedro, Babrio, Aviano y las Fábulas Anónimas contienen relatos con temáticas y estructuras narrativas bastante diversas, como enigmas, chistes, cuentecillos eróticos, mitos, etc. No obstante, mayoritariamente se presentan fábulas protagonizadas por animales -lo cual dio lugar a nuestra concepción moderna del género-: sólo en la colección de Fedro hay 78 fábulas protagonizadas por animales de las 122 conservadas, y en la de Aviano, 29 de las 42 que conforman su obra.
Debido a que el mundo de la fábula generalmente está caracterizado a partir del conflicto de sus protagonistas, donde quien se empeña en obrar de una manera contraria a su fuerza o su naturaleza sufre algún tipo de consecuencia, es completamente esperado que el desarrollo de las mismas se presente a través de un agon o disputa, ya sea física o verbal (el león, por ejemplo, suele abusar de su fuerza en detrimento de los débiles). Por ello el propósito del siguiente trabajo es analizar el papel preponderante del campo léxico del daño y el perjuicio - iniuria, crimen, contumelia, malum, fraus, damnum, nex, etc.- en la fábula animalística de Fedro, y observar la manera en que dichos vocablos tienen una relación consustancial con el papel que desempeñan los distintos animales en estos relatos, sobre todo en la figura del león, la zorra, el lobo y la oveja.


Mariana Pablo Norman (UNAM / UAM), "Los animales como agentes de la magia en antiguos papiros griegos"

A lo largo de la historia antigua, la magia ha pretendido por medio de ensalmos y acciones rituales, conocer y obtener aquello que por medios naturales le está negado al ser humano convencional. Se erige entonces la figura del mago. Así la magia −a través de su ejecutor− es entendida como una unidad de palabras y acciones compuestas por elementos diferenciados que persiguen un fin mágico. Los elementos esenciales que componen la práctica mágica son: el logos, los amuletos y talismanes, el sacrificio y la libación. Tradicionalmente los animales suelen estar relacionados a la acción ritual del sacrificio, sin embargo ejecutan funciones mucho más complejas. En esta ponencia propongo el análisis de siete papiros griegos sustraídos del libro Textos de magia en papiros griegos en los que los animales fungen como agentes de la magia en tres facetas diferenciadas: la primera de ellas (P.VII. 42 y XII. 4) estudia al animal –gato, vaca, buitre, toro, escarabajo, halcón, cangrejo, perro, lobo, serpiente, caballo, quimera, cabra, etc.− como agente de las divinidades. La segunda (P I. 4; IV, XI), estudia al animal –gato, gallo, asno y perro− como agente de los símbolos nictomorfos vinculados a la práctica mágica. La tercera estudia (P.III.7;  XX. 20)  al animal −serpiente, puercoespín, cinocéfalo, lagarto, león y tamarisco− como simbolismo de elementos simpatéticos en los procesos mágicos.

Lorelí González Blancas, (Universidad Nacional Autónoma de México), “El cambio en el simbolismo del ciervo desde la Antigüedad hasta la emblemática del Siglo de Oro”
El ciervo es un animal que aparece constantemente en la literatura y el folclor. Desde la Antigüedad ha representado a las fuerzas naturales, a dioses de diversas mitologías y al equivalente de éstos en la religión cristiana. Su simbolismo, por consiguiente, ha cambiado dependiendo del contexto histórico, cultural y religioso en el que este animal se ha insertado.
La figura del ciervo contiene un despliegue de simbolismos diversos, desde sus orígenes culturales paganos, pasando por la cristianización de éstos en los bestiarios medievales, luego durante la coexistencia de ambas tradiciones—la pagana y la cristiana—, periodo en el que confluyen todos estos significados, y finalmente con una función adoctrinante en los emblemas del Siglo de Oro.
La presente ponencia expone el simbolismo del ciervo desde sus primeras manifestaciones en la tradición clásica y diversas culturas pertenecientes a la Edad Antigua, luego en la Edad Media, hasta llegar al emblema aurisecular. Estos cambios en el significado del simbolismo del ciervo se evidencian a través de testimonios literarios pertenecientes a cada época—como los bestiarios y romances—, ejemplos de tipo folclórico y cultural expuestos en obras y artículos que tratan este simbolismo y mediante la definición de algunos emblemistas del Siglo de Oro.




MESA 2:  Animales infernales y otras bestias
del Medioevo


Clemente Aurelio Sánchez Rodríguez (Universidad Nacional Autónoma de México), “Los animales fieros en el Infierno de los enamorados del Marqués de Santillana”

Durante la Edad Media la representación pictórica de la entrada del Infierno fue comúnmente ilustrada como una boca de un animal salvaje que tragaba con fiereza y agresividad a los condenados que recién llegaban a este espacio de condena. El principal objetivo de esto era provocar pánico en los espectadores que veían tales ilustraciones.
                En el ámbito de la literatura, a inicios del siglo XV, el Marqués de Santillana escribió un poema titulado el Infierno de los enamorados, cuya temática era condenar las pasiones amorosas. En tal texto destaca la presencia de un grupo denominado “animales fieros” y mismo que está conformado por leones, serpientes, tigres y dragones. Algunas de las características que comparten estos animales son las de ser depredadores y, en efecto, salvajes. El objetivo de este trabajo es el de analizar la función poética de tal grupo dentro del Infierno de los enamorados de Santillana y, a su vez, reflexionar sobre hasta qué punto tal conjunto zoológico del poema puede relacionarse con las bocas de los infiernos medievales que tuvieron una importante representación durante la Edad Media para asimilar la devoración que sufrían los pecadores.

Penélope Marcela Fernández Izaguirre (Universidad Nacional Autónoma de México), “El oso y el dragón: La representación animalizada del Infierno en dos relatos del Espéculo de los legos 
En el imaginario que provee la literatura hispánica medieval, animales como el Oso y el Dragón conservan en su ensamble simbólico el conocimiento que el hombre de aquélla época tiene sobre su destino en el más allá, ya que son imaginados como el acceso al Infierno e incluso devoran el cuerpo de los pecadores hacia su interior. En este tenor, en el Capítulo IX, “De los Apostatas” y el Capítulo XVIII “Del sacerdote concubinario e de su conpannera” del Espéculo de los legos; presentan historias en las que, mediante el mecanismo del exemplum, se realzan negativamente las características físicas y conductuales de los animales (maravillosos o no) para moralizar a la sociedad y, por ende, controlarla. Así, a partir del clímax del encuentro entre dos mundos, el de los vivos y el de los muertos, estos relatos decodifican la clave moralizante: el arrepentimiento es condición muy importante para la salvación, a pesar de la intervención de las bestias que intentan atrapar a las almas para ingresarlas al Infierno.



Gerardo Román Altamirano Meza (Universidad Nacional Autónoma de México), “La transformación de hombre en lobo en algunas narraciones medievales:  los casos de la Saga los Volsungos y los lais franceses ‘Bisclaveret’ y ‘Melión’”
 
La transformación de humanos en animales es uno de los motivos folklóricos que Thompson, en su conocido Motive Index, agrupa en la clasificación B, “Animal motifs”. Como se señala en este documento, desde los albores de la humanidad, la transformación de un humano en animal debe ser considerada como uno de los elementos narrativos más ancestrales en la historia ficcional de nuestra especie. Entre ellos, es decir entre esos elementos narrativos, un lugar especial lo ocupa la trasformación de un hombre en lobo. En esta comunicación mi objetivo es analizar tres narraciones medievales: dos provenientes de la cuentística medieval francesa (los lais “Bisclaveret” y “Melión”) y uno de la tradición germana, contenido en la Saga de los vonlusngos. Mi objetivo al comparar estas tres narraciones es evidenciar los submotivos que pueden aparecer en éstas y otros relatos relacionados con la tradición del motivo “la transformación del hombre en lobo”. Para ello, dividiré la ponencia en tres apartados: a) el hombre lobo en la tradición clásica, b) la presentación de las obras medievales antes dichas c) análisis comparativo de los motivos que integran estos relatos.



MESA 3: Animales novohispanos


Marcos Cortés Guadarrama (Universidad Veracruzana, Instituto de Investigaciones Lingüístico-Literarias), "El escorpión y el alacrán: historia de un veneno y su motivo poético”

Mediante una revisión histórica por distintos textos, desde la Edad Antigua grecolatina, pasando por la Edad Media, hasta llegar al Virreinato de la Nueva España, la presente ponencia intenta hacer una historia literaria de estos artrópodos arácnidos que han fascinado al hombre, entre otras cosas, por el temor a su veneno. A diferencia de las abejas , que han encarnado un símbolo positivo cuando éstas se encuentran con el héroe (santos y filósofos, entre otros casos), el escorpión y el alacrán siempre han simbolizado un aspecto sumamente negativo en la literatura religiosa y laica. E incluso esta poética de lo negativo también se ve reflejada en la ciencia arcaica, concretamente, en la literatura médica novohispana, en la cual puede leerse una representación propia de la categoría textual de lo maravilloso en los distintos remedios caseros y fantasiosos para intentar curar la picadura de este insecto.
Con esta ponencia se intentará destacar, por una parte, la sutil y bella poética de lo negativo y, por otra, la representación de la naturaleza agreste e indomable y su aparente sometimiento por el arte de la medicina antigua; representación que linda con otros intereses de estudio, como el mestizaje cultural originado tras la conquista americana en el siglo XVI y desarrollado durante el XVII y XVIII


Tania Jiménez Macedo (Universidad Nacional Autónoma de México), “Devotos de cuatro patas: los bueyes en los milagros del beato Sebastián de Aparicio, según Fray Agustín de Vetancurt”

 El relato de milagro es un microgénero de larga tradición en la literatura religiosa cristiana, que tiene sus orígenes en la Biblia misma. A Nueva España llegó con los primeros conquistadores, y desde entonces consiguió arraigarse en la preferencia de autores y público lector. Suele mantener una estructura simple y constante, con pocas variantes: un devoto se halla en una situación de peligro o de difícil solución y solicita la ayuda divina por algún intermediario celestial (Santa María, un santo, un ángel o Cristo mismo), quien presta oportuno socorro a quien lo invoca. El creyente y el intercesor son los actantes principales, y frecuentemente pueden sumarse un agente del daño, que es el que pone la integridad del devoto en riesgo, y un auxiliar, que posibilita que el apoyo celestial llegue al necesitado.
El siglo XVII fue la época de auge del microgénero, y una de sus peculiaridades más notorias en este periodo fue la participación constante de animales como actantes en la narración. A veces desempeñaban la función de agentes del daño, cuando, por ejemplo, un caballo arrastraba a su jinete o algún toro embestía a un distraído espectador en pleno coso; a veces, como auxiliares de la piedad o la justicia de Dios, cuando un perro lograba frenar un caballo y salvar así la vida del jinete, o cuando un hato de cerdos impedía escapar a una ladrona de la Virgen. Pero también llegaban a actuar como los creyentes más fieles, y para muestra me propongo analizar los milagros del beato Sebastián de Aparicio –contenidos en el Menologio franciscano de Agustín de Vetancurt (1697)– donde intervienen sus bueyes, cuya obediencia y mansedumbre se resaltan como virtudes del buen cristiano. En el simbolismo religioso que destaca de las acciones de los cuadrúpedos se percibe una mezcla de elementos cristianos y paganos que revisaré en esta oportunidad.


Nancy Fabiola Méndez López (Universidad Autónoma Metropolitana), “Manatí: mito y reinvención en la literatura novohispana”

La representación del manatí y los relatos que se generaron a partir de dicho animal en las crónicas de viaje son un espejo de la visión que se proyectaba sobre América desde los ojos europeos, en diversos niveles de interpretación. El ideario medieval que relataba historias sobre sirenas ─mujeres hermosas, símbolos de lujuria y portadoras de mensajes de muerte─ reaparece por medio de este mamífero siglos después, en las nuevas tierras localizadas por los peninsulares. La historia y la literatura se conjugaron a partir de este momento con mitos que trataban desde invenciones, imaginaciones, adaptaciones y comparaciones con el imaginario del viejo mundo. Estas consideraciones quedaron plasmadas en la iconografía, xilografías, grabados y en recopilaciones escritas en prosa sobre la historia natural del nuevo mundo. Es mi intención hacer un recorrido por el nuevo imaginario del manatí que permita aproximarnos al prodigio americano visto desde un mundo peninsular desconocido. Quizá los rastros de este mito y la nostalgia sobre el primer acercamiento entre dos culturas quedaron implícitos en la historia de este pez-mujer que sigue encantando al hombre con su inteligencia y capacidad de adaptación.


Xochiquetzalli Cruz Martínez (Universidad Autónoma Metropolitana-Iztapalapa), “El huitzilli (colobrí) resucitado: una reelaboración de la muerte y el amor en algunas culturas originarias” 

Es ya bien conocido que la significación de los animales en los pueblos originarios (mexica y maya) de Mesoamérica  es, fue y será un referente simbólico importante, en tanto que interviene en la construcción del imaginario porque, por ejemplo, fija rituales, estadios ontológicos (cosmogonía, magia) etc., que dan forma y sentido a la visión del mundo. Por tanto,   ya   que   las   obras   literarias   novohispanas   (crónicas,   códices)   son   “documentos privilegiados   de   la   historia   del   imaginario”   (Le   Goff,   1211)   será   objetivo   de   esta comunicación indagar, con base en la teoría de los indicios y la microhistoria de Carlos Ginzburg, la posible significación literaria de un animal: el colibrí,  presente en dos obras del siglo XVI: la Historia General de las Cosas de la Nueva España de Fray Bernardino de Sahagún y  el Chilam Balam de Chulayel  y en otra del siglo XVIII el Rabinal Achí  para con ello dar una interpretación literaria plausible, basándonos en la zooliteratura, de este animal como símbolo erótico y de resurrección , y constatar con ello que el uso del animal es un puente ideológico que nos acercará a la visión de mundo del mundo maya y mexica.




MESA 4:  Misticismo, especismo y literatura


Georgina Mejía Amador (Universidad Nacional Autónoma de México), "La grulla y la polilla: danzas de origen chamánico en la poesía mística islámica "

En esta ponencia propongo comparar la danza y la poesía de dos vertientes sufís (Mevlevíes y Alevíes) que simbolizan la transformación del alma por medio de la polilla y la grulla. Para poetas como Rumí, Avicena, Ibn ‘Arabi, al-Hallay y ‘Attar, la polilla se consume en el fuego, de la misma manera en que el alma sufí arde de amor por Dios y anhela fundirse con Él, mientras que la grulla simboliza el alma que asciende durante su auto-conocimiento. Pero no es posible comprender cabalmente esta experiencia mística y poética sin la danza, por lo que un segundo objetivo de este trabajo consiste en analizar aquellos elementos de origen chamánico en “La danza de la grulla” y “La danza de la polilla”, que han nutrido el imaginario poético sufí, mediante la comparación de estos animales como metáforas del alma. Llevaré a cabo este estudio a la luz de la semiótica de Kristeva y Peirce, dado que en la culminación de la búsqueda mística del sufí se anula el signo: cuando el hombre se reconoce en Dios, deja de existir un Objeto separado del Sujeto; es un retorno al momento previo a la escisión ontológica del hombre, equiparable al concepto de lo semiótico en Kristeva. Sin embargo, es necesario traducir esta experiencia visionaria, por lo que transitar de lo indecible al lenguaje poético y dancístico, metaforizando dicha experiencia en la grulla y la polilla, equivaldría al proceso significante en el que lo semiótico deriva en un discurso dancístico, musical y corporal propio de lo simbólico en Kristeva. Es decir, el danzante sufí, semejante a la grulla y a la polilla, es la metáfora icónica (Peirce) del proceso de la purificación de su alma.


Lidia Alejandra Vásquez Velazco, (Universidad Nacional Autónoma de México), “Animalia textual:  De la literatura a la industria de la moda”

El siguiente proyecto retoma la concepción de literatura como expresión de una ideología. La hipótesis de lectura es asumir que la literatura expresa cómo nos relacionamos con los animales. Por esa razón, se debe revisar cómo una obra es recibida e interpretada, en este caso por la industria de moda. Algunos diseñadores, inspirados en la literatura, usan la piel de animales para sus prendas, mientras que otros apuestan a una moda sin crueldad.   El objetivo principal de esta ponencia es dar cuenta de cómo una obra literaria impacta el mundo de la moda, la cual promueve o justifica su postura. Por medio del análisis de la recepción de dos obras literarias en la industria de la moda: Los juegos del hambre y Al este del sol y al oeste de la luna.  Se demostrará que la literatura no sólo es fuente de inspiración, sino también la politización de un conflicto, en este caso de la explotación y abuso de los animales.  Gracias al traslado de la imagen de los animales de la literatura a la industria de la moda, se puede deducir una ecuación: literatura + animales + ideología= moda. Con dicha ecuación es posible deducir el estatus de los animales en las producciones artísticas, las cuales, o  perpetúan en las masas de consumo una ideología premoderna de explotación, o bien anuncian ya un nuevo de tipo de ideología que fundamente la relación entre los humanos y los animales.


Antonio Puente Méndez, (Universidad Nacional Autónoma de México), “Vivisección, ecofeminismo y derechos animales en “The Fox on the Line” de Emma Donoghue”

En el cuento “The Fox on the Line” incluido en su colección The Woman Who Gave Birth to Rabbits (2002), la autora irlandesa Emma Donoghue ficcionaliza el intento de dos mujeres que a finales del siglo XIX intentaron prohibir la vivisección (la disección de animales cuando siguen vivos con finalidades científicas) en Inglaterra. A través del establecimiento de una voz narrativa que hace énfasis en cómo las sociedades patriarcales utilizan un lenguaje que animaliza a las mujeres para marginalizarlas, el cuento muestra los vínculos que existen entre el feminismo y la ecología (y específicamente en el trato hacia los animales).
                El propósito de esta ponencia es analizar la forma en que la voz narrativa reflexiona sobre la opresión de las mujeres y cómo esta se vincula con la dominación de la naturaleza en la cultura androcéntrica que se representa en el cuento por medio de una práctica común para la ciencia que sigue vigente hasta nuestros días: la vivisección. Para esto, haré un análisis ecofeminista del cuento de Donoghue para resaltar los vínculos que existen entre la lucha por los derechos de las mujeres y la defensa de los animales, ya que hay paralelismos entre el lenguaje sexista y el lenguaje especista que ha permeado la ciencia, la historia y, por supuesto, la literatura.



MESA 5: Animales y Derecho


Grecia Sofía Munive García (Universidad Nacional Autónoma de México), “Los animales en el Digesto de Justiniano”

Desde la antigüedad, la presencia de los animales en la literatura ha estado presente en todas las civilizaciones, incluyendo la romana.
La antigua Roma es la cuna del derecho occidental y ha legado a la humanidad diversos textos jurídicos que son sumamente valiosos para la posteridad. En estos textos, al igual que en la literatura en general, podemos vislumbrar la referencia a los animales.
A través de este trabajo pretendo mostrar la importancia del tema de los animales en una de las cinco partes que conforman, Corpus Iuris Civilis, es decir, en el Digesto.
En la gran compilación del Derecho Romano, realizada por orden del emperador Justiniano y publicada el 16 de diciembre del año 533, la presencia de los animales es clara. En esta obra, la cual es una de las obras jurídicas más importantes de la antigüedad, se puede apreciar la forma en la que los romanos clasificaban a los animales y el valor o importancia de ciertos tipos de animales en la vida cotidiana de los romanos; encontramos desde los animales pertenecientes al ganado hasta las fieras que se utilizaban en diversos espectáculos para asesinar a los delincuentes que habían infringido la ley.
El derecho, en su origen más remoto, se basó en las costumbres del hombre, en su vida diaria, y los animales eran parte de la vida de éste; por lo anterior, en la legislación, en este caso en el Digesto, podemos constatar que los animales fueron parte fundamental de la vida de los romanos desde la época arcaica hasta la época del emperador Justiniano.


Oscar Hernández Santiago (Universidad Nacional Autónoma de México), “Los animales en los procesos judiciales”
El derecho penal moderno no otorga a los animales el estatus jurídico de personas, es decir, titulares de derechos subjetivos, por lo cual no pueden comparecer ante la jurisdicción criminal como acusadores o acusados. Sin embargo, durante la Edad Media y la temprana Modernidad hubo varios casos en los que los animales “comparecieron” como acusados ante las autoridades seculares y eclesiásticas. Si bien es cierto estos litigios tenían solamente un valor simbólico para aplacar la animosidad de los súbditos, también es verdad que pueden aportarnos una visión diferente sobre la justicia del Antiguo Régimen.
Así, el objetivo de la presente ponencia consistirá en exponer dos casos (Francia y España) en los que fueron juzgados un puerco y unas langostas. Finalmente concluiremos con un interesante (y casi inédito) caso del que conocieron autoridades de la Nueva España en el siglo XVII para juzgar a unos gusanos. Con ello pretendemos mostrar cómo la categoría de sujeto jurídico en el Antiguo Régimen obedecía a una antropología jurídica mucho más flexible que la originada en la modernidad.


MESA 6: Animales y Edad Media


Carlos Gerardo Hernández Paulino (UAMI), Las funciones de los animales en el Caballero çifar

Es bien sabido que se denominan libros de caballería al género literario en prosa que cuentalas hazañas y hechos maravillosos de caballeros andantes y, conforme al lugar donde fueronescritos, pueden contener elementos fantásticos reflejados en lugares, artefactos y, sobretodo, en animales. En este tenor, analizaré algunos episodios importantes donde aparecenlas bestias en el Libro del caballero Zifar.  Por ejemplo, el caballo, animal que, por un lado,caracteriza a Zifar, a decir de Campbell (El héroe de las mil caras) como “el mejor homnedel mundo” y que, al mismo tiempo, funciona como marca de maldición, ya que al décimodía cualquier equino perteneciente al caballero fallece a consecuencia de los vicios de unantepasado; la leona como función de separación ya que se aleja a Garfín, hijo mayor delZifar, de  su familia y la función de presagió que desempeña este felino al anticipar elcambio de estado de la familia de Zifar; el asno, como comparación de las característicasfísicas y mentales del Ribaldo; sólo por mencionar algunos animales que aparecen la obra.Con   lo   anterior   pretendo   resaltar   tres   núcleos   funcionales   importantes:   caracterización,detonante de la acción y función didáctica (donde se busca transmitir las características quedebe tener un buen cristiano). Para lograr este cometido rastrearé la significación simbólicade dichos animales, posteriormente lo anclaré a la acción narrativa del Zifar, para concluircon una interpretación plausible de por qué estos animales conforman la actitud moral yliteraria de esta obra. Es por ello que utilizaré la información de los bestiarios medievales, así como otrasobras, el Libro de Alexandre, por ejemplo. La clasificación de motivos de Todorov, el índicede Aarne y Thompson, además de lo propuesto por Marta Haro, María Jesús Lacarra, entreotros, en lo que se refiere al cuento.


Mariel Aldonza Palma Villaverde (Universidad Nacional Autónoma de México), “El texto como tejido: La repercusión del mito de Aracné en La Celestina

La estructura de La Celestina es un modelo único, porque es un texto que teje todos sus elementos, unos con otros, de manera estratégica: todo lo que los personajes dicen tiene una consecuencia en sus destinos, y una repercusión, a la vez, en el destino de los otros.
La idea del tejido y el texto como símiles –y la palabra como acción tejedora de una vida– nació en la Antigüedad Clásica y se continuó y desarrolló hasta el Renacimiento.
El engaño, su advertencia, y los consejos sobre cómo sortearlo, son una constante en literatura medieval, que parte de la tradición clásica. Entonces, para la presente comunicación, se trabajará la idea de Celestina como “araña” que hila y construye la trama, partiendo del mito de Aracné.
Hacia mis conclusiones, puntualizaré por qué, bajo el planteamiento anterior, Celestina fracasa como “hilandera” del texto, ya que, como la desdichada Aracné, la vieja alcahueta también termina por condenarse a sí misma debido a su propio tejido lingüístico.


José Luis Franco Tizcareño (Universidad Nacional Autónoma de México), "Hacia una aproximación filosófica sobre fingir y mentir como expresiones del saber: La gulpeja en el Libro de los gatos

En la baja Edad Media uno de los motivos por el que las colecciones de exempla se adentraron como vehículos de enseñanza moral, fue el concepto de saber. El mismo don Juan Manuel en el Libro infinido, explica que: “…la mejor cosa que omne puede aver es el saber”. La literatura sapiencial no sólo fue lección literaria sino también filosófica y retórica.  En este breve trabajo, la intención es aproximarse desde la significación de la filosofía medieval, a dos conceptos: saber fingir y saber mentir. La finalidad es ofrecer un comentario que contemple estas actitudes en el “Enxemplo de la gulpeja”, del Libro de los gatos.  El marco filosófico principal se ampara en estudiar el aspecto y el temperamento animal, sobre todo en lo referente a lo que es fingir o simular que consiste en aparentar ser otra cosa distinta de lo que en verdad se es, de un modo bastante peculiar y así aparentar tener una moral sin tacha; y mentir que sucede cuando se tiene una cosa en el corazón y se expresa otra distinta con palabras u otros signos. Por eso, se dice que el mentiroso tiene corazón doble y doble pensamiento: uno, porque sabe lo que es verdad y calla, y otro, cuando lo que dice es falso. El caso por analizar es cuando la gulpeja, en un breve exemplum del texto mencionado, finge estar muerta para cazar a otros animales y devorarlos. El punto es demostrar que algunos animales no sólo imitan conductas humanas sino que pueden ser humanizados a través de la narrativa.


Andrea Flores García (UAMI), "Entre hilos, pinceles y piedras preciosas: la creación de los animales en los libros de caballerías "

La presencia de la fauna en los libros de caballerías presenta distintas vertientes para su estudio, pues no sólo aparecen maravillosas criaturas en batallas en cuevas, castillos y lagos, sino también fungen como criaturas de compañía, medios de transporte y guardianes de tesoros. Sin embargo, una aparición frecuente, y poco estudiada, aparece en la indumentaria de los personajes caballeresco, pues están bordados en los trajes de gala, pintados en las armaduras e incrustados en la joyería de las damas. Esta forma de representarlos es un nuevo acercamiento a estos libros, pues presentan una forma de transmitir mensajes secretos sobre el amor, el linaje y la fama de quienes los portan.
El interés de esta propuesta es analizar cómo los autores recrearon el simbolismo de algunos animales en sus obras para conocer la función que se otorga a cada animal en las prendas caballerescas, por lo que se hará referencia a varios libros de caballerías y se destacará su importancia en justas, bailes y combates





MESA 7: Animales, mito y tradición oral


Alejandra Camacho Ruán (El Colegio de San Luis), "Apuntes sobre la función de los animales en leyendas procedentes de la tradición oral actual"

La literatura de tradición oral es una literatura viva, que circula y camina de generación en generación por lo que ubicar en una época específica los textos procedentes de la memoria y transmitidos oralmente es con la premisa de que forman parte de un devenir histórico, del ciclo de la tradición que llega hasta la actualidad. Tomando como base un corpus de leyendas recopilado en Michoacán y San Luis Potosí que tienen como protagonistas a entidades femeninas, brujas, a el diablo así como las víboras cuidadoras de tesoros; busco presentar una revisión general de las asociaciones de dichos personajes con animales de diferentes especies, mamíferos, aves, reptiles. Ya sea que el diablo tome forma de burro o de perro, que las entidades femeninas tengan pies de gallina o pesuñas, o la relación que desde antaño existe entre las serpientes y los tesoros, los animales forman parte de la narrativa tradicional de México; develar algunas de las funciones de dichos animales dentro de las leyendas y en el contexto donde se enuncia sería parte del objetivo general del trabajo.


Marlon Martínez Vela, (El Colegio de San Luis), “El ratón espía en la tradición mexicana”

De los ratones ordinarios decía, que cuando alguno estaba amancebado en alguna casa lo saben los Ratones, y luego van y ahugeran los chilhuites, esteras y vassos, en que comen, ó beben; y esta es la señal; y á esto llaman Tlaçulli. Y cuando á la mujer casada los Ratones ahugeravan las nahuas, entendía el marido, que su mujer le hazia adulterio, y si ahugeravan la manta, entendía la mujer lo mismo del marido. Jacinto de la Serna, Pedro de Ponce y fray Pedro de Feria

Se sabe que el ratón es un personaje entrometido, tiene una eterna lucha con el gato, tiene vínculos con lo religioso y lo mágico, es considerado destructor, además se le asocia con los ladrones.  El objetivo de este texto es realizar un estudio comparativo, diacrónico del animal en relatos de la tradición oral hispánica y que se pueden rastrear en la Nueva España. Se toma como base el estudio exhaustivo de José Manuel Pedrosa, La historia secreta del Ratón Pérez en territorio ibérico.   La presente ponencia se centrará sobre todo en literatura de tradición oral: refranes como “Ratón que no sabe más que un horado, presto es cazado”; lírica infantil como El piojo y la pulga o La muñeca fea; también puede citarse la canción popular “El ratón” de Cheo Feliciano; el personaje que nos interese aparece de igual forma en el cuento tradicional El espejo mágico. Esto me permitirá hacer una revisión del papel que juegan los roedores en la tradición y que se refleja en la literatura oral y “culta”.


Gloria Libertad Juárez San Juan (Secretaría de Educación Pública), “Cucurrucucú... no llores: el motivo de la paloma en la canción mexicana”


Manuel Olivares (Universidad Veracruzana), “La Tlanchana, sirena prehispánica”

Me interesa abordar la relación existente entre la leyenda prehispánica de la Tlanchana (de la tradición oral de la zona comprendida en lo que alguna vez fue la zona lacustre de Lerma, en el Estado de México), un ser mitológico de carácter acuático, cuya fisionomía se componía de una bella mujer con cola de una serpiente y la imagen mitológica de la sirena de origen europeo criatura a la que se asimila la Tlanchana por parte del hombre occidental que conoce la leyenda y la adapta a sus referentes culturales.
Para este propósito es necesario, en primer momento, presentar la leyenda y los atributos de este ser, sus cualidades fantásticas y características físicas para apreciar el vínculo que se crea a partir de las similitudes entre esta leyenda de origen prehispánico y el referente cultural del europeo centrado en la sirena, una criatura muy presente en el imaginario colectivo occidental desde la tradición literaria griega.
Esta asimilación de la Tlanchana con la sirena muestra un proceso de aculturación y mezcla de ideas y conceptos tanto de imaginario prehispánico como el del hombre occidental. Además es precisamente la imagen de una sirena la que se ha impuesto y persistido como representación plástica de la leyenda en artesanías de barro que muestran ese referente.


Mayra Borbón, (UAMI), “El mito yaqui Ume Surem y el génesis de los animales”



El mito yaqui Ume surem o Los sures narra el origen del pueblo yaqui y el surgimiento de los animales que hoy habitan sus vastos territorios: el venado, la tortuga, el coyote, el jabalí, el conejo, las garzas de los canales, entre otros. Este mito se centra en explicar que los yaquis descienden de unos seres llamados “sures” que habitaron el Valle del Yaqui desde tiempos inmemorables y que fueron testigos de la llegada de los evangelizadores jesuitas a Sonora. En ese momento un palo parlante les anuncia a “los sures” que su mundo está punto de cambiar porque llegarán unos “curas” a bautizarlos. Los sures que aceptan el bautismo se convierten en hombres yaquis y quienes la rechazan se transforman en animales. La comunicación analiza la versión del mito que aparece en la compilación de narraciones orales Jiak nopko etéjoim/Pláticas en lengua yaqui (Universidad de Sonora, 1998) además de los cuentos: “La zorra que engaña a los hombres”, “El oso que se convierte en persona”, “La coyota que se convierte en mujer” y “El zorrillo que se convierte en hombre”, textos en donde los animales toman la forma humana para darle una lección moral a los yaquis.
El mito de los sures también busca legitimar la pertenencia del territorio yaqui. Desde la Conquista, la nación yaqui ha sido despojada de su propiedad comunal y del agua de su río para construir presas. Estas narraciones orales indígenas evidencian la tensión de un pueblo que se encuentra en medio del cambio y de la tradición.



MESA 8: Animales poéticos



María Luisa Castro Rodríguez (Universidad Nacional Autónoma de México), “Ruiseñor, ruégote, por cortesía, que me digas… Las aves corteses que hablan en la poesía castellana del siglo XV”

Las aves, como es bien sabido, son un elemento esencial para la construcción del espacio amoroso, el locus amoenus; su canto acompaña siempre a los amantes, ya sea para endulzar el momento del encuentro, acompañar durante la espera o contrastar con la tristeza que experimenta el desdichado de amores. Ya Margit Frenk en su discurso de entrada a la Academia Mexicana de la Lengua habló de las aves, su canto e, incluso, sus voces; Mariana Masera ha estudiado también a las aves en la tradición popular; por otra parte, Pampín Barral ha analizado la presencia del ruiseñor en la poesía cortesana de cancionero; sin embargo, las aves no sólo aparecen y cantan, y no sólo hablan en la lírica popular, sino que también teorizan y reflexionan sobre el amor en la poesía cortesana del siglo XV, son interlocutoras de los amantes pero también consejeras reflexivas e, incluso, amantes mismos que dialogan independientemente del poeta quien las observa. El ruiseñor y el gallo son las aves que se asocian más directamente con el amor en el siglo XV y serán quienes dialoguen, ya como enamorados, ya como mensajeros de amor.
En este trabajo se propone analizar el habla de estas aves cortesanas que reflexionan sobre el amor, tomando como punto de partida cinco poemas —cuatro que aparecen en el Cancionero de Baena y uno del Cancionero Geneal— y que, aléjandose de los tópicos de la lírica tradicional, se construyen como transmisoras del amor cortés, construyendo, con su presencia, no sólo el espacio del locus amoenus, sino la reflexión en torno al sentimiento amoroso. El objetivo es analizar la presencia de estas aves tradicionales en un contexto diferente: el cortesano; y otro tipo de poesía: la lírica culta castellana del siglo XV.



Eduardo Molina Fernández (Universidad Autónoma de Tlaxcala), “El unicornio en la poesía quevediana ”

En este trabajo se analizan las fuentes y el sentido de algunas de las composiciones poéticas donde Quevedo utiliza el motivo literario del unicornio. Se revisan algunos poemas donde existen breves menciones al animal, en lo que podría confundirse como meras lexicalizaciones del mismo, sin embargo y a partir de la revisión del conjunto de casos, se podrá observar una consistencia semántica en el uso del tópico. En el estudio, de entre los poemas 36, 641 y 716 (según la numeración de Blecua) sobresale el número 700, que figura como el último de los cuatro romances de un pequeño bestiario difundido en el Cancionero Antequerano entre 1627 y 1628. “El unicornio” aparece, a su vez, junto con otros poemas dedicados al Basilisco, al ave Fénix y al Pelícano, lo que también nos da cuenta del proyecto editorial del que formaron parte. Para el análisis se emprende la revisión de los antecedentes literarios hispánicos que dotaron inicialmente al unicornio de un sentido y uso con carácter religioso y moral hasta llegar a su utilización como materia literaria de corte burlesco. Así, una vez instalado el motivo fantástico en la poesía de burlas veremos al unicornio como un medio para vehiculizar varios objetivos específicos en la poesía de Quevedo, entre ellos: confrontar el estilo culto y de compleja sintaxis de otros autores; también servirá para construir elaborados conceptos que se valen de frases tradicionales de registro oral y en verso de arte menor.  Sin embargo y sobre todo, le servirá al autor como un recurso para satirizar contra los maridos cornudos. De esta forma, los versos serán elaboraciones que aprovechan las distintas fuentes literarias en las que ya se asociaban diversas virtudes al unicornio, con la distinción de que esta vez la propuesta estará configurada para funcionar como una sátira contra estereotipos típicamente quevedianos.


Lázaro Tello Pedró (Universidad Autónoma de la Ciudad de México), “El perro en la poesía española

Como el texto de Salvador Novo, Las aves en la poesía española, o la antología de El toro en la poesía española, decidí juntar una pequeña colección de poemas sobre el perro. Al reunirlo me di cuenta que había motivos que podían irse agrupando, así que escribí un texto que se llama “El perro en la poesía española”. En él desgloso la relación del perro con el sol, con los cereales, con la noche y con la muerte, con el lobo, con la vejez y con la pureza; las referencias oscilan desde una cancioncilla del siglo xvii hasta un poema de Alfonso Reyes o Manuel José Othón. No existe un orden cronológico sino el hilo conductor son las relaciones ya mencionadas. Cito a Sebastián de Covarrubias, el “Romance del Rey don Pedro”, Francisco de Quevedo, Luis de Góngora, Federico García Lorca, Eliseo Diego, Alejandra Pizarnik, Francisco Segovia, Roberto Juarroz, Juan Carlos Mestre, Antonio Gamoneda.


Libertad L. Estrada Rubio (Universidad Nacional Autónoma de México), “Lepidópteros de finales del siglo xix, o sobre las mariposas en el modernismo "
Resumen: La atmósfera del fin de siècle, que de acuerdo con la crítica corresponde aproximadamente al último cuarto del siglo XIX y la primera década del XX, se caracterizó, a grandes rasgos, por la insatisfacción y el tedio del artista que debía vivir en un entorno materialista, cientificista e intransigente dominado por una burguesía frívola e ignorante que no apreciaba el valor trascendental del arte. Esta convulsa y ecléctica época vio nacer diversos movimientos artísticos, que al relacionarse pluridisciplinariamente, mostraron en sus creaciones el temple espiritual de su tiempo; tal fue el caso del modernismo literario y del art nouveau o modernismo estético. En este contexto se desarrollaron varias composiciones literarias y plásticas cuyo centro de atención fueron los insectos alados, como las mariposas. En el presente trabajo, me propongo mostrar cuál fue el simbolismo que algunos poetas modernistas hispanoamericanos otorgaron a estos lepidópteros de hermosas alas, y cómo este aspecto metafísico encontrado en la literatura también aparece de algún modo en los objetos art nouveau que he elegido como ilustración de mi lectura. El corpus literario que analizaré está conformado por “Mariposas” de Manuel Gutiérrez Nájera (1887), “Crisálidas” y “Mariposas” (1891-1896) de José Asunción Silva, “Mariposa negra” de Manuel Machado (1902), “Sonatina” (1895) y “Divina Psiquis” (1905) de Rubén Darío. Dentro del conjunto de imágenes que ilustrará esta comunicación destacan broches, peinetas, espejos, floreros, jarrones, mobiliario doméstico, ropa femenina y anuncios comerciales.
Como se apreciará en el siguiente escrito, los trazos curvos, etéreos e irisados de las mariposas no sólo ornamentaron el modernismo literario y artístico, sino que alegorizaron la tesitura anímica con que los seres sensibles hicieron frente a la vida en un panorama cultural y espiritual compartido.




MESA 9: Animales y literatura contemporánea



Nayeli de la Cruz de la Rosa (Universidad Nacional Autónoma de México), “De roedores, pasiones e ideas: la narrativa de Efrén Hernández”

La narrativa de Efrén Hernández está compuesta por 14 cuentos y dos novelas, de ellos dada la relevancia que adquiere la figura del ratón sólo nos enfocaremos en revisar sus funciones y connotaciones en el cuento “Santa Teresa” y la novela La paloma, el sótano y la torre del escritor mexicano. Interesa destacar cómo dicha figura cumple con diversos cometidos; en primera instancia, el ratón con base en un proceso de configuración metafórica se resignifica para revertir sus valores clásicos, cuya finalidad estriba en describir, a partir de un plano ético, al hombre. Esto es, las acciones del ser humano se explican bajo las coordenadas del arriba y el abajo, las cuales si bien son comprendidas bajo las significaciones de bien y mal, sin embargo, en esta obra subvierten tales valores de los que subyace la relación hombre-roedor, ésta resulta indisoluble en la prosa del autor. En segundo lugar, la configuración del roedor tras erigirse un recuso que rompe con las formas más tradicionales es una clara muestra de cómo Hernández produce su obra a la luz de las propuestas de vanguardia. Así pues, dicha configuración hará factible conocer cuál fue su importancia en la narrativa de la época. Veremos, finalmente, cómo la figura del ratón, bajo un proceso gradual, supera su condición ordinaria hasta erigirse un ser complejo, un símbolo privilegiado de la narrativa de Efrén Hernández.


Leticia Mejía Pérez (Universidad Nacional Autónoma de México), "La figura del animal y su función literaria en tres cuentos fantásticos "

Pareciera que el hecho de saber que la zooliteratura tiene una gran historia que la respalda y una multiplicidad de ejemplos que nombrar no da cabida a encontrar nuevos elementos narrativos en la literatura contemporánea. Los cambios físicos, culturales, sociales y económicos obligan a los escritores a renovarse, a introducir efectos que despierten al lector y se acoplen a los diferentes modos de vida. A pesar de esos cambios, los sentimientos humanos (el amor, el odio, la envidia, el miedo, la tristeza, entre otros) permanecen, sólo se agrandan o disminuyen de acuerdo a las circunstancias que rodean al hombre. Los cuentos que se analizan en este trabajo (“Conejos blancos” de Leonora Carrington, “Carta a una señorita de París” de Julio Cortázar y “Pantera en Jazz” de Carlos Fuentes) trastocan varios de estos sentimientos, gracias al manejo preciso del lenguaje de sus autores.  Aquí, el animal tiene una función literaria dentro del texto, toda vez que los autores usan su figura como herramienta para dar el toque fantástico al hecho real que se dispara hacia lo inverosímil. Hago esta referencia, porque en los animales se canaliza la frustración de los personajes de los relatos: lo fantástico aparece con la muerte, la enfermedad y la soledad. No es necesaria la irrupción por un fenómeno extrasensorial o llamativo, tampoco hacen falta las explicaciones. La realidad del relato no se transforma, se transforman las emociones de los protagonistas y del lector. Cada autor, desde su trinchera proyecta un mismo tema: los miedos y pasiones del hombre. Como técnica narrativa, en las tres obras narrativas el animal es un símbolo de aislamiento, que se fortalece al momento de usarlo como un estereotipo de las costumbres humanas (el orden, la rutina, la individualidad). Ese símbolo es una sombra del hombre, una sombra en la que trasciende lo fantástico.


Alejandro Romero Ramírez (Universidad Nacional Autónoma de México), "El Bestiario: cinco pulsiones de Arreola"

En alguna ocasión el maestro Juan José Arreola dijo –definiendo el sentido literal de la oralidad– que “las palabras bien acomodadas crean nuevas obligaciones y producen una significación mayor que la que tienen aisladamente”. De esta manera, es en la oralidad juglaresca donde Arreola fusiona lo literario con lo fabuloso y lo cotidiano con lo cosmológico aprovechándose de sus lectores que construyen en su imaginario íntimo las creaciones más asombrosas que los bestiarios no habían ofrecido hasta entonces sólo con palabras.
¿Por qué Arreola no agregó imágenes a sus escritos, por qué nos privó de las representaciones pictóricas que los bestiarios medievales ya consignaban? Arreola viaja a la inversa, las bestias ya son fantásticas en sí mismas sólo hace falta descubrirlas. La prosa de Arreola con su sintaxis clara y rigurosa logra la distribución armónica de las partes que conforman la natura fantástica de sus textos. El Bestiario está escrito con un léxico que no recurre ni a lo popular ni a lo rebuscado; plasma una prosa con un ritmo quasi poético y polifónico.
                Nos muestra esa parte que compartimos con los animales: el ajolote (simillima mulieribus) semejante a las mujeres, padece también el ciclo lunar; el bisonte resulta un modelo de vigor perdido; la hiena destaca esa parte deleznable y repugnante de la humanidad; la foca es lasciva, voluptuosa y sexual. Arreola adopta los tecnicismos de la biología moderna dándoles una connotación literaria.
                En los textos que conforman el Bestiario opera una red temática compuesta por los siguientes elementos: metamorfosis, mecanicismo, ironía, erotismo y femeneidad que nos permite
ligarlos y establecer con mayor claridad las relaciones intertextuales.



Luis Juan Carlos Argüelles Lona (Universidad Nacional Autónoma de México), “Características animales en los personajes de tres novelas de Mariano Azuela que parodian la revolución”

Las moscas, Domitilo quiere ser diputado y El camarada Pantoja son tres novelas de Mariano Azuela que pueden considerarse como un ciclo paródico de la Revolución Mexicana por lo abrupto, grotesco y rapaz de los hechos que narran. En ellas los personajes adquieren características animales y son descritos en su ambiente que refleja el estado de naturaleza, donde el pez grande se come al chico. Francisco Villa es un centauro, un león, una pantera; Obregón es el León del Norte (aunque Blasco Ibáñez lo ve más como un jabalí por su ancha espalda) y otros lo ven como un pavo real.
                Para Mariano Azuela la política es “algo así como una gran plaza de gallos, corrida de toros, abasto de cualquier otro de esos sitios donde hay que derramar sangre”. Una gran batalla constante anterior al contrato social que ubica a los seres humanos como animales. Quizá por eso es tan efectiva su caracterización por vía de la animalización, así logramos entender los alcances de cada personaje en el rol de su etología.
                En las novelas del corpus, desde la primera, con el sugerente título, Las moscas, la Revolución Mexicana se nos presenta en el lapso de 1915 a 1930 como un enjambre de insectos que revolotean en medio del desorden buscando sustento.  En Domitilo quiere ser diputado y El camarada Pantoja las características animales permanecen como una constante que mantiene el tono de carnaval. Los personajes se nos presentan como: gallinas cluecas, corales de guajolote, culebrillas, ojos de aguilucho, patos perseguidos, cerdos gordos, hábiles peces de agua, borricos enamorados, asnos, bueyes, ratas de bodega, viejos zorros matreros, agarra pollos, potros de persoga, notas estridentes de rata, mansitos corderos, etcétera. Se trata de una forma primigenia de la metáfora que compara el comportamiento humano con formas ancestrales comunicarnos.


MESA 10: Félidos literarios




Angélica Nathalie Ortiz Olivares (Universidad Nacional Autónoma de México), “El lenguaje secreto de los animales, una lectura ecfrástica del mito saloméico”

Al referirnos a la figura de la infame Salomé, la bella princesa bailarina cuya danza logró llevar a la muerte a San Juan Bautista, la presencia animalística y su importancia iconográfica y simbólica suelen pasar desapercibidas.
Tres son las principales presencias animales dentro del mito saloméico: el león, el pavo real y el gato. El primero de estos lo encontramos en el inconcluso poema Hérodiade de Stéphane Mallarmé y, gracias a un estrecho vínculo hipertextual, en el cuento “Hérodias” de Gustave Flaubert. El segundo, en la afamada obra Salomé de Oscar Wilde, ilustrada por Aubrey Beardsley. Finalmente, el tercero, en el poco conocido drama para marionetas La cabeza del Bautista de Ramón del Valle Inclán.  
En la presente propuesta, a través de un análisis intertextual y ecfrástico, se busca analizar la vital relevancia a nivel simbólico de la presencia de dichos elementos animalísticos dentro de la construcción literaria y pictórica del mito de la decapitación del Bautista.    



Alan Flores Flores (Universidad Autónoma de Nuevo León), “Thy fearful symmetry: Borges y los tigres”

La presencia del tigre acompañó a Borges durante toda su vida, este animal tiene un lugar especial en su obra, un tigre es el primero de sus protagonistas en el cuento El rey de la selva publicado a los 13 años en un diario estudiantil. El tigre continuó presente en la poesía y la narrativa borgeana, hasta que a los 85 años, escribiera: Mi último tigre una nota donde acompañado de su amada María Kodama visitaron el jardín zoológico de la provincia de Luján en Argentina, esta nota aparece en su penúltimo libro publicado en vida: “Atlas” de 1984.

Median 71 años entre El rey de la selva y Mi último tigre en los cuales este felino visitó a Borges en forma de poema, a veces de personaje y otras como símbolo. En la obra de Borges encontramos tres formas y símbolos del tigre: I. El tigre como un animal amoroso; II. El tigre de la literatura; III. El tigre como metáfora de la ceguera;  IV. Otros usos literarios del tigre. Estas cuatro formas amplias, se despliegan a su vez en otros usos más específicos. Analizar los usos del tigre en la literatura borgeana es el propósito de esta ponencia.


K. Gabriela Nájera Ramírez (El Colegio de San Luis, A. C.), "Creencias y relatos en torno a la cacería de tres animales prehispánicos"
Como se sabe, la obra de fray Bernardino de Sahagún, Historia general de las cosas de la Nueva España, estuvo nutrida por informantes que respondieron a cuestionarios elaborados por el fraile. Para el caso del libro onceno, en su apartado dedicado a los animales, entre las posibles preguntas figuró una encaminada a conocer las maneras en que los indígenas cazaban, pues se trataba de una de las principales actividades de cualquier pueblo.
                A partir de las respuestas, la Historia general… da cuenta no sólo de cuáles animales se cazaban y con qué fines, sino de la figura del cazador, los rituales de cacería y las creencias y relatos que a este respecto circulaban en la oralidad.
                Por tanto, mi propuesta de ponencia pretende tratar las creencias y relatos incluidos en los actos de cacería de tres animales que Sahagún recupera en su obra: el tigre o jaguar, la ototolli o atotoli y la quetezcatl.
                Como se verá, los relatos acerca de la cacería de estos animales tienen vínculos con otras historias como la Leyenda de los soles y se pueden identificar motivos comunes entre éstos y otros animales del décimo primer libro del franciscano. Además, se observará que la cacería va más allá del enfrentamiento del hombre con la naturaleza; en cada ejecución recae en el cazador el pasado ancestral de la humanidad, lo que lo hace portador y transmisor de una tradición que incluye técnicas y conocimientos prácticos, pero también historias, leyendas, cuentos y canciones, que son igualmente útiles para su oficio.


Enriqueta M. Olguín (Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo), "Los Felinos Epiclásicos de Huapalcalco"
Los hallazgos arqueológicos de esculturas zoomorfas, por lo general se interpretan siguiendo preceptos iconográficos que difícilmente han cambiado en el transcurso de las décadas. Así se sigue hablando de “tigres”, “leones” o de “jaguares”, de modo indiscriminado.  Las interpretaciones iconográficas tradicionales se siguen repitiendo una y otra vez, la mayoría de las ocasiones ignorando las características particulares de los félidos americanos y las que son diagnósticas  de los lugares en los que se encuentra o se encontraban la fauna asociada a una dieta específica. Este trabajo cuestiona las tradicionales identificaciones de los félidos abordando un par de esculturas felinas arqueológicas procedentes de Huapalcalco.